Encargados de la formacion musical
Curso de supervisor musical
La educación musical es un campo de práctica en el que los educadores se forman para carreras como profesores de música de primaria o secundaria, directores de conjuntos escolares o de conservatorios de música. La educación musical es también un área de investigación en la que los académicos realizan investigaciones originales sobre las formas de enseñar y aprender música. Los especialistas en educación musical publican sus hallazgos en revistas especializadas y enseñan a los estudiantes de educación universitaria o de escuelas de música que se están formando para ser profesores de música.
La educación musical toca todos los ámbitos del aprendizaje, incluidos el psicomotor (el desarrollo de habilidades), el cognitivo (la adquisición de conocimientos) y, en particular, el afectivo (la disposición del alumno a recibir, interiorizar y compartir lo aprendido), incluyendo la apreciación y la sensibilidad musical. Muchos currículos de educación musical incorporan el uso de habilidades matemáticas, así como el uso y la comprensión fluida de una lengua o cultura secundaria. Se ha demostrado que la constancia en la práctica de estas habilidades beneficia a los estudiantes en una multitud de otras áreas académicas, así como en la mejora del rendimiento en pruebas estandarizadas como el ACT y el SAT. La formación musical desde la educación preescolar hasta la postsecundaria es común porque la participación en la música se considera un componente fundamental de la cultura y el comportamiento humanos. Las culturas de todo el mundo tienen diferentes enfoques de la educación musical, en gran parte debido a las diferentes historias y políticas. Los estudios demuestran que la enseñanza de la música de otras culturas puede ayudar a los alumnos a percibir los sonidos desconocidos con mayor comodidad, y también demuestran que la preferencia musical está relacionada con el idioma que habla el oyente y con los demás sonidos a los que está expuesto dentro de su propia cultura.
Prácticas de supervisor musical
El martes 26 de abril, el Parlamento luxemburgués aprobó una nueva ley para ofrecer clases gratuitas de música, pero también de teatro, danza, coro y dicción a los estudiantes menores de 18 años. El objetivo de esta política educativa es ofrecer las mejores oportunidades para el futuro de todos los niños y jóvenes.
«Las clases de música de alta calidad, gratuitas y accesibles a todos los niños y jóvenes, contribuyen a su realización personal y al desarrollo de sus capacidades individuales. Este apoyo no sólo refuerza nuestra cultura y cohesión social, sino que también proporciona a los niños y jóvenes habilidades clave para el futuro» Claude Meisch, Ministro de Educación Superior e Investigación y Ministro de Educación, Infancia y Juventud de Luxemburgo
A partir del próximo curso escolar 2022/2023, alrededor de dos tercios de las clases que se imparten actualmente, así como una gran parte de las asignaturas, serán gratuitas. Aunque algunas clases podrán seguir siendo de pago, las tasas se limitarán a nivel nacional para reducir el desequilibrio regional y garantizar la igualdad de los alumnos, independientemente de su lugar de residencia.
Empresas de supervisión musical
La dirección de orquesta es el arte de dirigir una actuación musical, como un concierto orquestal o coral. Se ha definido como «el arte de dirigir la actuación simultánea de varios intérpretes o cantantes mediante el uso de gestos» [1] Las principales funciones del director son interpretar la partitura de forma que refleje las indicaciones específicas de la misma, establecer el tempo, garantizar las entradas correctas de los miembros del conjunto y «dar forma» al fraseo cuando proceda. [2] Los directores se comunican con sus músicos principalmente mediante gestos con las manos, normalmente con la ayuda de una batuta, y pueden utilizar otros gestos o señales como el contacto visual[3] Un director suele complementar su dirección con instrucciones verbales a sus músicos en los ensayos[3].
El director suele situarse en un podio elevado con un gran atril para la partitura completa, que contiene la notación musical para todos los instrumentos o voces. Desde mediados del siglo XIX, la mayoría de los directores de orquesta no tocan un instrumento cuando dirigen, aunque en períodos anteriores de la historia de la música clásica era habitual dirigir un conjunto mientras se tocaba un instrumento. En la música barroca de los años 1600 a 1750, el grupo solía estar dirigido por el clavecinista o el primer violinista (véase concertino), un enfoque que en los tiempos modernos han recuperado varios directores de música de este periodo. Dirigir mientras se toca un piano o un sintetizador también puede hacerse con orquestas de foso de teatro musical. La comunicación no suele ser verbal durante la representación. Sin embargo, en los ensayos, las frecuentes interrupciones permiten al director dar instrucciones verbales sobre cómo debe tocarse o cantarse la música.
Supervisor de música
Se ha demostrado que las funciones ejecutivas están sólidamente correlacionadas con diversas métricas de salud, logros, riqueza y calidad de vida [5]. El desarrollo del control cognitivo parece ser particularmente predictivo de la salud, el éxito y el bienestar más adelante en la vida [6]. Debido a esta fuerte asociación entre el desarrollo del control cognitivo y las medidas positivas del comportamiento humano, un gran número de investigaciones se ha centrado en investigar las formas en que se pueden mejorar dichas habilidades, especialmente en la primera infancia. Tales estudios han demostrado que las funciones ejecutivas pueden mejorarse mediante programas de entrenamiento cognitivo consistente e intensivo en niños de 7 a 12 años [7,8], el entrenamiento con videojuegos en adultos mayores [9], así como las artes marciales [10], la meditación de atención plena [11,12], el ejercicio aeróbico [13] y el entrenamiento deportivo en niños de 5 a 10 años [14]. Sin embargo, no todos estos estudios incluían un grupo de control activo o recogían medidas antes y después del entrenamiento, por lo que las pruebas sólidas de los efectos de transferencia asociados al entrenamiento siguen siendo limitadas.